Una de las cosas más importantes cuando acabáis de adquirir una vivienda nueva, sobre todo si vivís en una comunidad de propietarios, es elegir al administrador más adecuado para vosotros. Será una persona que lleve vuestras cuentas, por lo tanto tendrá que estar muy bien preparado.
Y es que el administrador es la figura más importante junto con el presidente de la comunidad, ya que es la persona que gestiona todo vuestro dinero y se encarga de servir de intermediario ante cualquier problema vecinal que se presente. Por estas razones esta persona tendrá que ser de vuestra absoluta confianza. Sin ir más lejos recuerdo a unos amigos que no supieron elegir bien a su administrador y tuvieron muchos problemas. Incluso en una noche se tuvieron que ir a dormir al Hotel Merce porque amenazaban con desahuciarles.
Os cuanto detalles para saber si es el administrador adecuado o no lo es.
Transmitir tranquilidad a sus representantes, de nada sirve tener un administrador si no confiáis en que pueda hacer bien su trabajo.
- Atienda las necesidades de todos los vecinos. Si alguno de ellos tiene problemas o existe algún conflicto entre ellos, es el verdadero responsable de la gestión y resolución del mismo.
- Conocimiento o estar en comunicación directa con profesionales del derecho, la construcción o la economía. Al menos deberá saber aconsejaros cómo proceder.
- Además debe responder a las necesidades de los propietarios en cualquier momento que se le solicita. Así que si os rechaza en algún momento podréis interponer una queja para cambiar de administrador.
- Deberá presentaros informes periódicos sobre las famosas derramas y la situación económica de la comunidad, además suministrar la información a cualquier vecino que lo requiera.
- Saber negociar los gastos con los proveedores para reducir al mínimo el gasto de la comunidad así como saber dónde pedir subvenciones para comunidades y dar nuevas opciones para conseguir dinero extra.
- Gestionar las deudas de algunos vecinos morosos y de comprobar cómo se desarrollan las obras en el edificio.
Como puedes comprobar, la figura del administrador de fincas es muy importante para el buen desarrollo de la convivencia. Si comprobáis que no cumple alguna de estas funciones, será motivo suficiente para que cambiéis de administrador. No hay que tomárselo en bromas porque ya hay varios casos de personas que han intentado hacer su agosto con este tipo de gestiones y han acabado en la cárcel.