Cada vez son más los edificios y urbanizaciones que se adentran en el mundo de las reformas con el fin de cambiar sus ventanas para obtener un mayor ahorro de energía. Mientras que cambiar las ventanas en una vivienda particular puede suponer un gasto mayor, cambiar las ventanas de todo un edificio o urbanización supone un coste inferior para cada propietario puesto que se hacen precios adaptados a la cantidad de productos que se van a instalar y/o comprar. Es como quien compra al por mayor y al por menor, obviamente le sale más económico al que compra una gran cantidad de producto y es por eso por lo que las comunidades están optando por realizar este tipo de reforma comunitaria.
Las cuentas son sencillas: cada propietario paga la instalación y ventanas de su vivienda y la parte que le corresponda de la factura de las ventanas de las zonas comunes. De este modo resulta más económico aunque siempre tenemos que afrontar el hándicap de tener que poner de acuerdo a todo el vecindario, pero ese es otro tema.
Según estos fabricantes de ventanas de PVC, los beneficios de realizar este tipo de reforma son muchos pues se gana tanto en seguridad como aislamiento, confort, durabilidad y ahorro. Ahora bien, tipos de ventanas hay muchos y por eso hay que ser muy conscientes del modelo que debemos seleccionar partiendo de unos datos básicos o de las necesidades que tengamos. Por eso, en esta fábrica de aluminio adaptan el producto a las necesidades del cliente de modo que un experto realiza un estudio previo de las estancias donde se van a instalar las nuevas ventanas para saber qué tipo de cristal y cerramiento sería el más adecuado.
Un ahorro importante
Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía, el porcentaje de gasto de una casa en la climatización puede suponer el 48% de la factura y, de ese porcentaje, sólo el 75% corresponde al gasto necesario porque el 25% restante corresponde a la energía de la vivienda que se pierde en las ventanas. En otras palabras, tras instalar las ventanas adecuadas, una vivienda que gasta 100 euros mensuales en electricidad podría ahorrarse 25 euros, lo que supone un ahorro de 300 euros al año.
Actualmente en España hay una ayuda que el Gobierno ha llamado Plan Renove de Ventanas y que entra en el plan de gestión energética del hogar para combatir el calentamiento global. Es una ayuda que está dirigida a personas físicas o jurídicas y entidades que quieran tener un ahorro energético cambiando sus viejas ventanas por unas más eficientes.
Y es que el ahorro, tanto económico como energético, es verdaderamente importante. Según la OCU tener unas buenas ventanas puede repercutir en un ahorro de hasta el 20% en la factura de gas y electricidad. Una cuarta parte de la energía que se produce en un hogar acaba destinándose a cubrir la que se pierde por las rendijas de las ventanas, hasta tal punto que la instalación de doble cristal de una ventana puede reducir estas pérdidas en un 50%. A mayor calidad del vidrio y del marco, menor pérdida de energía, aunque tampoco es necesario volverse loco, el truco está en conseguir el equilibrio óptimo entre inversión y ahorro.